lunes, 12 de noviembre de 2007

May


May Welland es un personaje de "La Edad de la inocencia" de Martin Scorsese, film que me fascina y tortura desde hace ya muchos años.

Hace poco, comentábamos que es hermoso que las películas sean los puntos de partida de otro tipo de escritos, que te impulsen a reseñar algo más allá que una crítica al uso.

El otro día fue un artículo de opinión y hoy esta "poesía", por llamarle de alguna forma, que me surgió de la película y de este personaje (interpretado por Winona Ryder) mientras escribía el guión de un programa de radio sobre la música de este film.

La poesía no es lo mío, pero como surgió de una forma espontánea y despreocupada, de la misma forma os la muestro:


"
Entre sus alas pequeñas
se encuentra la ensenada
de tu futuro arrebatado.

Su nombre envuelve flores
y despertares de un astro rey
que te gira la espalda.

Sus frágiles pupilas
y sus coloreadas mejillas
adornan la negritud y la pérdida
que no comprendes.

Sus blancos gestos
y sus manos delicadas
agujerean impíamente
tus deseos más perseguidos
y tus anhelos más pueriles.

De la negación a la desesperanza
hay un solo camino:
el atajo sinuoso
y torpe de tu confianza.

Tu cuna compartida
se transmuta en un lecho sombrío
que te entierra en vida,
salpicando en tu rostro
la arena del tiempo
y el barro insidioso
de tu suceder negado.

Y no te diste cuenta."

El plumero del guionista


Crash" arrebató, en los Oscars, el más importante a la merecedora y bellísima "Brokeback Mountain".

La decisión de los académicos fue discutible, en su día, aunque ayudó a valir la historia de Ang Lee. La realidad volvió a aliarse con la de décadas atrás expresada en la historia de amor de esos dos chicos. En fin, no hubo final feliz en los Oscars, como tampoco lo tuvieron en su affaire amoroso.

Vista hoy, con el reconocimiento a mi holgazanería en su momento, aunque lo cierto es que me generaba pura rabia ver el film ganador, la propuesta de Paul Haggis es más que discutible.
La película está bien, sobretodo formidablemente escrita y dibujada en el papel, pero es de aquellas obras que sabes que están hechas por un guionista. O sea, que se le ve la trampa, el artificio narrativo.Crash es interesante y posee imágenes explosivas, nunca mejor dicho, pero es efectista en muchos tramos, machacona en su temática y reiterativa.

Estableciendo un paralelismo, "Grand Canyon" de Lawrence Kaskan resultaba más convincente expresando casi lo mismo: la sensación de violencia continua en una sociedad desquiciada. Pero lo hacía con mayor frialdad aparente, mostrando sin enfatizar.

A Haggis se le va la mano y, en muchos momentos, se echa en falta mayor finura o nociones connotadas. Es demasiado explícito en su ideología, acumulando demasiados ejemplos de aquello que quiere expresar.
Es como el cine de Fernando León, ves una escena y sabes cuál será la siguiente. "Crash" es un buen film, no lo negaré, pero se le ve demasiado el plumero.
PD1: Me gusta mucho más el "Crash" de David Cronenberg. Fascinante historia malsana basada en una novela angustiosamente bella como la de Ballard.
PD2: En unos días, publicaré la crítica de "In the valley of Elah" la segunda como director de Haggis que es otra cosa.